En un contexto de amenaza, extorción, persecución que acechaban sobre la cabeza de personas e instituciones que trabajan en la defensa del medio ambiente; circuló -en julio último- un documento de solidaridad con el hermano Paul McAuley, suscrito por el Instituto Bartolomé de Las Casas (IBC) y el Centro de Estudios y Publicaciones (CEP) de Lima - Perú.
Esta iniciativa fue dada a conocer en la última reunión ordinaria de Pax Christi Perú del 11 de julio; donde sus integrantes -conocedores de la situación que atraviesa el país y consternados por el atropello que sufren los que trabajan por la defensa de los bienes de la creación- decidieron suscribir el documento sumándose a los del Instituto de los Hermanos de La Salle y de la Conferencia Peruana de Religiosos (CONFER), entre otros.
El citado documento, alerta sobre la millonaria campaña propalada por los principales medios de comunicación social donde los defensores ecologistas son satanizados ante la opinión pública. En ella, se les acusa de ser instigadores de la violencia, “soliviantar a la gente” con actitudes antipatriótica y frenar el progreso del país.
El religioso Paul Mc Auley, de origen británico, pertenece a congregación de La Salle. Llego al Perú hace 20 años, en sus 10 primeros años se dedico a fundar colegios Fe y Alegría en el norte de Lima. De ahí se desplazo -por mandato de su comunidad- a la zona del oriente peruano donde participo en la Red Ambiental Loretana. Esta red lo preside desde el 2006 educando, acompañando y movilizándose con la población en defensa del medio ambiente. Desde ella, enjuició al Estado por su pasividad frente al maltrato del medio ambiente. Por esta causa, es que se le abre juicio y se le cancela su permiso de permanecer en el país. ¿El delito? Protestar contra el maltrato del medio ambiente.
Si bien es cierto, esto se frenó momentáneamente (recientemente ha sido aceptado una medida cautelar para que los tribunales se pronuncien sobre una acción de amparo y un recurso de hábeas corpus presentado) sin embargo, no está del todo superado. Hoy existen otros religioso, agentes pastoras y personas sobre la cual también penden esta acusación. Por ello Pax Christi ha decidido suscribir el documento reconociendo en estas personas ciudadanos que asumen su tarea de construir un mundo diferente con justicia y paz. (W. Powosino G.)
Esta iniciativa fue dada a conocer en la última reunión ordinaria de Pax Christi Perú del 11 de julio; donde sus integrantes -conocedores de la situación que atraviesa el país y consternados por el atropello que sufren los que trabajan por la defensa de los bienes de la creación- decidieron suscribir el documento sumándose a los del Instituto de los Hermanos de La Salle y de la Conferencia Peruana de Religiosos (CONFER), entre otros.
El citado documento, alerta sobre la millonaria campaña propalada por los principales medios de comunicación social donde los defensores ecologistas son satanizados ante la opinión pública. En ella, se les acusa de ser instigadores de la violencia, “soliviantar a la gente” con actitudes antipatriótica y frenar el progreso del país.
El religioso Paul Mc Auley, de origen británico, pertenece a congregación de La Salle. Llego al Perú hace 20 años, en sus 10 primeros años se dedico a fundar colegios Fe y Alegría en el norte de Lima. De ahí se desplazo -por mandato de su comunidad- a la zona del oriente peruano donde participo en la Red Ambiental Loretana. Esta red lo preside desde el 2006 educando, acompañando y movilizándose con la población en defensa del medio ambiente. Desde ella, enjuició al Estado por su pasividad frente al maltrato del medio ambiente. Por esta causa, es que se le abre juicio y se le cancela su permiso de permanecer en el país. ¿El delito? Protestar contra el maltrato del medio ambiente.
Si bien es cierto, esto se frenó momentáneamente (recientemente ha sido aceptado una medida cautelar para que los tribunales se pronuncien sobre una acción de amparo y un recurso de hábeas corpus presentado) sin embargo, no está del todo superado. Hoy existen otros religioso, agentes pastoras y personas sobre la cual también penden esta acusación. Por ello Pax Christi ha decidido suscribir el documento reconociendo en estas personas ciudadanos que asumen su tarea de construir un mundo diferente con justicia y paz. (W. Powosino G.)